Biodiversidad de la Península Valdés
(Patagonia Argentina)
Maquias densas espinescentes
Es verosímil pensar que el tipo de vegetación más desarrollado de la Península Valdés lo constituya una maquia, o matorral alto y denso, constituida por un conjunto de especies arbustivas espinescentes y de porte alto. Son lo más parecido a un árbol que puede encontrarse en esta zona.
Muchas de las especies leñosas especies de estas comunidades son de crecimiento lento, especialmente bajo un clima seco como el patagónico, por lo que difícilmente se recuperan después de ser cortadas. Muchas de estos arbustos tienen frutos carnosos que se dispersan por aves como Schinus johnstonii, Condalia microphylla, Lycium chilense, Ephedra ochreata. Junto con estas especies suelen encontrarse otros arbustos cuyos frutos son vainas como Prosopis alpataco y Prosopidastrum striatum. Algunas especies características del Monte como las jarillas (Larrea spp.) son poco frecuentes en la Península, al contrario que en la zona continental próxima donde pueden llegar a ser los arbustos dominantes.
Actualmente solo se pueden ver retazos de esta comunidad en lugares favorables, por la mayor humedad edáfica o donde el hombre no los ha cortado: como son algunos lechos de barrancos y bordes de saladares. Sin embargo, todas estas especies se pueden ver, aisladas o formando pequeñas agrupaciones poliespecíficas, en gran parte de la Península, especialmente en los lugares menos degradados.
Posibles restos de una antigua maquia más extensa.